lunes, 21 de mayo de 2012

Como tú..->



Los momentos  buenos hay que saber esperarlos.
Cuando lo que quieres tarda en llegar, el deseo crece y allí tu corazón se prepara para vivir eso que tanto esperas.
Hay momentos que llegan y provocan paz, felicidad, alegria, amor..
Cuando menos lo esperas, es cuando la vida te sorprende y esas son las sorpresas que más se disfrutan y cuando uno sabe que lo que está por venir es bueno, esperar no es una agonía, es una fiesta.
Los grandes momentos de la vida son como un despertar, están llenos de sorpresas, llenos de belleza, llenos de magia, llenos de ternura, llenos de corazones acelerados, llenos de complicidad... Los grandes momentos de la vida (en general), ocurren más temprano de lo esperado. Como tú! <3

lunes, 14 de mayo de 2012

Estuve allí y ya no te vi..->



Caminé precipitadamente, creyendo que el pasado volvería en unos pocos instantes, me equivoqué. Observé a un chico sentado en el pasto, leyendo un libro de César Vallejo. Pensaba en las veces que tú y yo recorrimos ese lugar y sin embargo, hoy eran sombras de algo que nunca pudo ser. Me detuve un momento. El chico me empezó a mirar. Tuve ganas de preguntarle por qué se encontraba ubicado justo en ese lugar. No lo hice, era una desconocida para él. Como lo somos nosotros ahora; dos extraños, dejando atrás nuestra historia.

¿Qué miras cuando me miras?..->


Ojala hubieras visto

más allá de tus ojos,

de mis ojos,

para que puedas entender mejor lo que digo, 

lo que pienso, entender lo que siento...

martes, 8 de mayo de 2012

Quizás..->


Quizás llegó el momento de desconfiar de algunos de mis impulsos, de analizarlos con frialdad.
De no entregarme al demonio que a veces me domina y que busca, una y otra vez, confirmar el peor de los pronósticos.
Quizás llegó el momento de valorar lo que hay y dejar de lamentar lo que me gustaría que hubiera.
Quizás llegó el momento de aceptar que el enemigo no está afuera sino adentro y que la lucha es contra mis aspectos más destructivos.
Quizás llegó el momento de entender que es mejor si peleamos en el mismo bando, que si peleamos uno contra el otro.
Quizás llegó el momento...

lunes, 7 de mayo de 2012

Enamórame..->



• Quiéreme
• Bésame
• Piénsame
• Suéñame
• Siénteme
• Tómame
• Abrúmame
• Abrázame
• Sonríeme
• Acariciame
• Conquístame
• Ámame
• Amárrame
• Insístime
• Convénceme
• Deseame
• Coqueteame
• Descíframe
• Seduceme
• Necesitame
• Maravillame
• Extráñame
• Escúchame
• Sígueme
• Persígueme
• Encuéntrame
• Conóceme
• Aprétame
• Festejame
• Integrame
• Mirame
• Enciéndeme
• Imaginame
• Demuestrame
• Alientame
• Recuerdame
• Créeme
• Suspirame
• Codificame
• Alégrame
• Divierteme
• Perdóname
• Sorpréndeme
• Mimame
• Aconsejame
• Envuelveme
• Describime
• Aprendeme
• Escribeme
• Visitame
• Acercame
• Cuidame
• Adiviname
• Mala-costumbrame
• Acurrúcame
• Interprétame
• Búscame
• Meditame
• Entiendeme
• Salvame
• Inspirame
• Derriteme
• Enloqueceme
• Empachame
• Pruebame
• Tócame
• Incitame
• Agasajame
• Llámame
• Respetame
• Reconoceme
• Abrigame
• Sincerame
• Conservame
• Presentame
• Distraeme
• Encantame
• Corrigeme
• Tranquilizame
• Bailame
• Dime
• Incluyeme
• Aceptame
• Dibújame
• Ganame
• Adorame
• Participame
• Eligeme
• Conversame
• Respirame
• Llevame
• Cantame
• Despiertame
• Acorrálame
• Gustame
• Sugiereme
• Guiame
• Espérame
• Rescátame
• Contemplame
• Muerdeme
• Téntame
• Susurrame
• Empalagame
• Consuelame
• Anhelame
• Serename
• Protegeme
• Obsérvame
• Animame
• Contentame
• Analizame
• Valórame
• Atrapame
• Calmame
• Hipnotizame
• Provocame
• Culturizame
• Distingueme
• Desbórdame
• Sáname
• Rodeame
• Completame
• Reencuentrame
• Ansiame
• Intrigame
• Prometeme
• Alcanzame
• Perfilame
• Ayudame
• Pretendeme
• Consienteme
• Extasiame
• Embriagame
• Permitime
• Defineme
• Enrredame
• Creame
• Incentivame
• Confiesame
• Recuperame
• Cautivame
• Custodiame
• Admirame
• Fortaléceme
• Estabilizame
• Agéndame
• Favoréceme
• Súmame
• Léeme
• Mentalizame
• Constrúyeme
• Disfrútame
• Piropeame
• Elogiame
• Halágame
• Orientame
• Pertenéceme

• Encariñame
• Investigame
• Cortejame
• Excitame
• Satisfáceme
• Insinúame
• Descúbreme
• Confiame
• Recibeme
• Hechizame
• Sobreestimame
• Sonrójame*

martes, 17 de abril de 2012

Digamos que casi siempre pierdo más de lo que gano o viceversa..->


La primera vez que me enamoré lo hice con vendas en los ojos y con una fe más grande que la que se usa para mover montañas. Y la última vez fue casi idéntica a la primera; lo único que me faltó fue un poquito de fe, claro, sin contar que la primera fue hace diez años y la última fue hace casi un año.

Siempre creí que si me excusaba después de una discusión, él saldría corriendo a detenerme, besándome toda la cara exceptuando mis labios y me diría con el tono más fiel que “nada pasaba”. Vaya esperanzas las mías, siempre cargando con un excedente de fe.

Todo el tiempo me sobró mucho cielo y me faltó pisar tierra, a ello le atribuyo mi visión desenfrenada de ese amor maldito que tanto se me escapa aún de la palma de mis manos.

Caer en la maldición de querer sanar un corazón es una constante invariable para quien se enamora antes de ser correspondido o aún siéndolo.

Enamorarme de hombres con ideas que me vuelcan la cabeza siempre me ha sido un ejercicio tan eterno como el dicho ese que habla de los cangrejos. Ese pues, el de la inmortalidad. Verán que cuando una toma whisky y lo mezcla con las letras, sale una conjugación extrema de vísceras y raciocinio casi sin fin.

Cosa curiosa esa de descubrir que la vida compartida tiene doble valor, que los besos premeditados surgen de una revolución de pensamientos rebosantes de imaginación, que las pláticas que se tienen con las miradas son más permanentes que un roce del viento y que el roce piel a piel es tan efímero como una ola de mar.

Absolutamente todo para comprender que ellos sin miedo se van, absolutamente todo para comprender que la descripción que pueda yo hacer será un mero desatino a la perfección pero un gran tributo a esos pedacitos de felicidad etérea, a esas regresiones llenas de frío, ausencia, sol y edad; un absoluto desconsuelo al exilio que perdonamos siempre despacio y siempre sin parar.